Las rutinas en el hogar y la escuela ayudan a proporcionar regularidad, estructura y claridad al niño.
- Otros adultos deberían apoyarle para responder al comportamiento de su hijo.
- Las experiencias compartidas le ayudan a descubrir qué funciona y qué no.
- La escuela puede discutir el enfoque que sea apropiado para su hijo.
- Se puede asignar un consultor docente para brindar apoyo.
- En la escuela secundaria puede haber un mentor.
Es importante educar a los maestros sobre las necesidades especiales del niño y los problemas asociados con el TDAH.
- La escuela debe ayudar a proporcionar horarios regulares, estructura y atención positiva.
- En casa y en la escuela, cree un lugar tranquilo para trabajar y divida las tareas en pasos.
- Utilice un reloj despertador para mostrarle a su hijo cuánto tiempo tiene disponible.
- Tome descansos periódicamente para cambiar de actividad.
- Utilice capacitación especial para enseñar habilidades de comunicación e interacción con niños con TDAH. También vale la pena considerar que a medida que el niño crece, diferentes habilidades pueden resultarle útiles y vale la pena recibir capacitación de manera oportuna.
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